En los vestuarios se oyen muchos, muchos golpes. Las camaras apuntan a S-PAIN dando puñetazos a las taquillas.
S-PAIN: Maldita sea, maldito Rey. ¡Me la ha vuelto a jugar! ¿Cómo se atreve a jugarmela dos veces?
Vicky: Ese Rey es un tramposo. Deberían despedirlo.
S-PAIN: ¡Ah, no! Ése no se irá hasta que yo le de lo que se merece.
Vicky: Sí, es verdad. Perdona, cariño.
S-PAIN: Nadie se la juega dos veces a S-PAIN.
Asistente: Señor S-PAIN, le quedan cinco minutos para salir.
S-PAIN: Bueno, voy a desquitarme un poco.
Vicky: ¡Ánimo, cariño! ¡Tú puedes!